Sólo llanto, no. Mejor risa

’Frente al mundo que nos ha tocado vivir, pasividad es complicidad, y complicidad es crimen’ Octavio Raziel 1942- (México) Cuando quieras soltar el enojo y la ira que acumulas en tu interior, intenta cambiar ese sentimiento con una buena risa. Expertos en psicología de pareja, afirman que ’la risa relaja el cuerpo y libera el estrés. Un ejemplo: ’Ni traiciones ni brazos caídos en el PRI: Meade’. ’Solo llanto’, le responden. Además, este acto es una forma saludable de liberar impulsos agresivos, ya que el eco que reproduce puede ser asociado con el sonido de un grito. Por lo general, el estímulo de la risa suele ser una distracción que te permita desconectarte de las preocupaciones y responsabilidades de la vida cotidiana. Diversos estudios han demostrado que la risa reduce los niveles de hormonas que causan estrés, como el cortisol y la adrenalina. Esta es la razón que nos incita a proveerte de esa medicina celestial que es la risa, con unos cuentos:
Un hombre ha muerto. Durante su funeral, un amigo suya se acerca a presentar sus respetos.
Se pone delante del ataúd y empieza a decirle:
- Ya te lo decía yo Pepe, que el tabaco te va a matar, y tú venga tabaco y dale al tabaco y venga nicotina, ¡pero mira que eres burro!
La viuda se le acerca y le dice:
- ¡Déjale en paz! Que le ha atropellado un camión.
El amigo le responde:
"¡pero iba a por tabaco!"

El profesor de Johnny preguntó a toda clase qué hacían sus madres para ganarse la vida.
Una niña pequeña dijo que su madre era doctora, otra que su madre era ingeniera. Cuando fue el turno del pequeño Johnny, se puso de pie y dijo: "mi madre es una prostituta". Naturalmente, después de esta observación, lo enviaron a la oficina del director. Después de 15 minutos regresó a clase. Entonces la maestra le preguntó: "¿Le dijiste al director lo mismo que dijiste en clase?"
Johnny dijo: "Sí" "Bueno, ¿y qué dijo el director? "Dijo que cada trabajo es importante en nuestra economía, me dio una manzana y me pidió mi número de teléfono".
En la clase de Jaimito, la maestra les pide a los niños que se portaran bien aquella tarde porque el director iría a visitar la clase.
Les pide específicamente que no digan:
- Maestra: ¿puedo ir al baño a orinar?
Sino que digan:
- Maestra: ¿puedo ir a cortar una flor?
Suena más bonito y eso impresionaría al director. Llega la hora, y el director entra y se sienta, los niños empiezan a llamar a la maestra... Juanito dice: "Maestra: ¿puedo ir a cortar una flor?"
María: "Maestra: ¿puedo ir a cortar una flor?"
Pablito: "Maestra: ¿puedo ir a cortar una flor?"
Y sale Jaimito: "Maestra, ¿me presta papel para limpiarme el florero?"
Dios al crear el mundo puso nombre a los animales. (Cualquiera semejanza es pura coincidencia. Aclaración pertinente)
-Tú te llamarás perro.
-Tú te llamarás caballo.
-Tú te llamarás burro. Y siguió con otros nombres, pero al poco el burro le pregunta:
-¿Cómo me llamaba yo?
Y Dios contesta:
-Tu nombre es burro.
Después de unos minutos, el burro pregunta otra vez:
-¿Cómo me llamaba yo?
-Burro, le responde Y así cinco veces más le vuelve a preguntar lo mismo:
-¿Cómo me llamaba yo?
Hasta que Dios le responde:
-¡Burro, idiota! Y el burro dice:
-¡Yo ya casi me aprendía el nombre y justamente ahora me dices el apellido!
Se encuentran dos viudas en un cementerio. Una de ellas, muy feliz limpia la lápida de su marido y canta alegremente. La otra muy triste, llora desconsoladamente...
Al rato, la desconsolada mira a la contenta y le pregunta:
- ¡Ay, señora!, ¿cuánto tiempo hace que enviudó? - Seis meses, respondió en tono alegre la otra.
- ¿Y cómo hace para estar tan feliz si yo llevo 3 años y no he podido superar esta pena?
- ¡Ay, hija mía! porque después de muchos años, es la primera vez que sé dónde está y quién se lo está comiendo.
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