El alcalde Armando Martínez está descontrolado

Ayer cuando escuchaba el reclamo y amenazas directas del alcalde de Altamira Armando Martínez en contra de la empresa Ferrocarriles de México del grupo México Transportes, exigiendo que dieran mantenimiento a los que se llama derechos de vía, me di cuenta de que ya no le tiene el más mínimo respeto a la constitución política de nuestro país, al estado de derecho, ni a los procesos judiciales.
Con todo y su investidura de alcalde, que muchos dicen le quedó muy grande, y desde las mismas oficinas de la presidencia municipal, convocó a los ciudadanos de ese importante municipio a un acto de resistencia.
Al azuzar a la población a bloquear el paso de los trenes está cometiendo delitos tan graves como la asonada o el motín.
Armando Martínez está invitando a la apología de lo ilegal.
Debo de reconocer que al escuchar el tono de sus palabras y la conspiración a la que convoca, de inmediato me vino a la mente la imagen del dictador de Venezuela Nicolás Maduro que desde los medios y tribunas oficiales con frecuencia convoca al desorden, a la confrontación, a la provocación.
No puedo entender como después de tres años como presidente municipal de Altamira, Armando Martínez no dimensione la importancia que representan las empresas nacionales y extranjeras instaladas en el corredor industrial.
No es posible que no le importe el daño que provocará en la operatividad del puerto industrial y al vasto complejo de empresas que utilizan a diario el ferrocarril para sus diversas operaciones.
Su actitud arrogante y dictatorial están totalmente en contra de la ideología de los postulados de MORENA, partido por el que fue elegido como alcalde.
En pocas palabras Armando Martínez está descontrolado y alguien debe de ponerle un freno a sus amenazas y ocurrencias, al menos a las de hoy.
Hasta aquí mi Análisis y Comentario.
Soy su amigo: Christopher… Mora.
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