De la Ciudad
Guillermo Pimentel Balderas
Son democratizadores del financiamiento, permiten capitalizar proyectos productivos.
Amortiguan los desequilibrios económicos y favorece la participación ciudadana.
Diputado Pablo Trejo Pérez impulsa su fortalecimiento en Iztacalco. Insiste en que el reconocimiento institucional no debe ser simbólico, ya que, por ley las autoridades tienen la obligación de fomentar su creación y fortalecimiento.
Para el diputado Pablo Trejo Pérez, Vicecoordinador del Grupo Parlamentario del PRD en el Congreso de la ciudad de México, la importancia de las sociedades cooperativas reside en su utilidad para amortiguar los desequilibrios y la concentración que normalmente se da en las economías.
’Las cooperativas permiten financiar proyectos productivos que, de forma individual, en el sector lucrativo sería imposible realizar o bien, allegar recursos a personas que, de otra forma, no podrían acceder a financiamiento’, acentúa el legislador por medio de una proposición con punto de acuerdo que presenta ante la Comisión Permanente del Congreso de la Ciudad de México’.
Exhorta a la Secretaría de Trabajo y Fomento al Empleo de la Ciudad de México para que, en coordinación con la Alcaldía Iztacalco, fortalezca el apoyo y la promoción de las sociedades cooperativas en esa demarcación.
En el documento, Trejo Pérez subraya la importancia de reconocer y fomentar este modelo de organización social que, más allá de su dimensión económica, representa una herramienta para generar bienestar comunitario, empleos estables y cadenas de valor con impacto local.
En una breve charla con este reportero, el diputado por el Distrito 15 en Iztacalco, refiere que, como lo destaca en su propuesta, en el plano local, la Constitución de la Ciudad de México reconoce a las cooperativas como motores del desarrollo económico y establece, en su artículo 10, la obligación de las autoridades de fomentar su creación y fortalecimiento.
’En el punto de acuerdo –menciona-, hago referencia al estudio ’Radiografía Chilanga 2024’ del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), donde Iztacalco aparece con una competitividad media-baja en rubros como innovación y economía’. Por ello, destaca la importancia que se le ha dado a este modelo económico en nuestra ciudad pues las cooperativas generan una forma solidaria y diferente de hacer economía, enfocada en la transformación social.
El legislador capitalino apunta que en 2020 se contabilizaron más de 18,000 cooperativas en el país, con más de ocho millones de socios, destacando organizaciones como la Caja Popular Mexicana, la Cooperativa Pascual y la Cooperativa Cruz Azul.
’Se estima que en México existen más de 5 mil sociedades cooperativas de producción y consumo. Del universo de sociedades cooperativas en el país, más de 54% se dedican a la actividad primaria, principalmente pesqueras, mientras que el sector de servicios concentra 30% y las actividades de transformación sólo 15%’.
Y, en el caso de las cooperativas de ahorro y préstamo, registra que, su desarrollo en el país ha sido más sólido. ’El Consejo Mundial de Cooperativas de Ahorro y Crédito identificó en 2020, un total de 5.1 millones de mexicanos asociados a cooperativas financieras’.
El diputado Pablo Trejo Pérez, en el marco del próximo Día Internacional de las Cooperativas –se celebra el primer domingo de julio de cada año–, reflexiona, en que, ’es importante no sólo reconocer la relevancia y trascendencia de estas sociedades, sino también, promover el fortalecimiento e impulso de las acciones relativas al fomento cooperativo en la Ciudad de México y, especialmente, en Iztacalco, debido a que las sociedades cooperativas representan una vía para el desarrollo económico que, por su esencia intrínseca, promueve la participación, el sentido de comunidad y la generación de empleos, lo que a su vez constituye áreas de oportunidad para la competitividad y el crecimiento económico en la demarcación’, puntualiza.
Por último, Trejo Pérez espera que su proposición, turnada a las comisiones de Trabajo y Previsión Social y de Alcaldías y Límites Territoriales para su análisis, sea aprobada.
México tiene una larga tradición en el cooperativismo. Desde el siglo XIX, con la fundación del Círculo Obrero y la inclusión de la figura cooperativa en el Código de Comercio, hasta la actual Ley General de Sociedades Cooperativas, este modelo ha sido una herramienta clave del derecho social.
Por otra parte, cabe anexar que de acuerdo a información oficial, de la secretaria de Trabajo y Fomento al Empleo de la Ciudad de México, ésta define a las cooperativas como ’una asociación autónoma de personas y entre las actividades que realizan son: producción, distribución y bienes y servicios. Están unidas voluntariamente para satisfacer necesidades económicas, sociales y culturales’.
Precisa que hay varios tipos de cooperativas como: consumidores de bienes y servicio: sociedad, artículos y venta y distribución. Productores de bienes y servicios: sociedad, articuláis y comercializar. Y, ahorro y préstamo.
En información denominada: ’Ejes políticos del catálogo electrónico para las sociedades cooperativas de la Ciudad de México’, la Secretaría de Trabajo y Fomento al Empleo CDMX, informa que el Catálogo de Cooperativas de la Ciudad de México, se implementa como una plataforma que permita la promoción de los productos de las cooperativas de esta Ciudad.
El presente catálogo, detalla la dependencia, busca dar a conocer y acercar los productos de las cooperativas locales a la ciudadanía capitalina, como una estrategia mediante la cual los productos de las cooperativas sean adquiridos con mayor frecuencia y accesibilidad, lo que permitirá a largo plazo coadyuvar en el desarrollo de las cooperativas de la Ciudad de México’.
Además, establece: ’es una iniciativa que suma esfuerzos y promueve el desarrollo de la Economía Solidaria y el consumo local, benéficos para el desarrollo de la calidad de vida de la comunidad, el ambiente y la economía local’.
Ante estas consideraciones, cabe asentar lo que el diputado Pablo Trejo Pérez registra en su propuesta, en el plano local: ’la Constitución de la Ciudad de México reconoce a las cooperativas como motores del desarrollo económico y establece, en su artículo 10, la obligación de las autoridades de fomentar su creación y fortalecimiento’.
Insiste en que el reconocimiento institucional no debe ser simbólico, sino que debe traducirse en acciones concretas.