Desde 2014 el país tiene planes para el tratamiento adecuado de la enfermedad de Alzheimer pero lamentablemente hay gran retraso en su aplicación; además, ha sido estigmatizada con estereotipos sociales durante mucho tiempo, siendo que es un proceso neuroedegenerativo progresivo que puede manifestarse en diferentes formas empezando por los olvidos, fallas en el lenguaje, depresión, entre otras, y si se atiende a tiempo puede detenerse pero no la curación completa.
En conferencia de prensa a distancia así lo afirmó el Doctor José Alberto Avila Flores, Jefe del Servicio de Geriatría del Instituto Nacional de Nutrición ’Salvador Zubirán’, y subrayó la continuación de estereotipos alrededor de esta enfermedad, inclusive rechazó plenamente que forme parte de la llamada ’demencia senil’ porque es un proceso de deterioro que acelera con la edad de cada persona, aunque no es ineludible.
En el marco del Día Internacional del Alzheimer, acordado desde 1994 por la Organización Mundial de la Salud y la Federación Internacional de Alzheimer, el especialista forma parte del panel en donde participaron los doctores Elisa Otero Cerdeira, Neuórologa, de la Unidad de Trastornos del Movimiento y Neuorociencias de México, y el Doctor Oscar Calleros Zubiate, Psiquiatra con Alta Especialidad en Enlace (NEUROCOM).
En México, dijo Avila Flores, se calcula que hay 700 mil personas con diagnóstico y tratamiento por esta enfermedad progresiva y quienes enfrentan los elevados costos que oscilan entre 7 mil a 80 mil pesos, entre medicinas, cuidadores y medicamentos.
En cuanto a la cobertura que dan las instituciones públicas de la salud –ISSSTE e IMSS- señaló el especialista los 4 medicamentos dirigidos específicamente hacia esta enfermedad no están en el listado de sus básicos.
Inclusive hay una quinta fórmula dada a conocer hace pocos días en los Estados Unidos, pero no ha sido aprobada por las autoridades de salud del país vecino, aunque tiene buenos augurios en su aplicación.
El Alzheimer, dijo Otero Cerdeira, impacta en la claridad del lenguaje, el pensamiento, los estados de ánimo, la memoria y el juicio, de quienes tienen esta enfermedad y sus primeros síntomas pueden manifestarse claramente a los 6 meses de progreso, aunque, desafortunadamente, hay pacientes que llegan a los consultorios con secuelas de 10 a 12 años como antecedentes.
Los cuatro medicamentos especializados en este caso muchas ocasiones sirven para la detención del deterioro en los niveles de vida de los enfermos, acotó la neuróloga, y los diagnósticos tempranos solamente pueden aplicarse en los casos donde haya indicios de antecedentes familiares; aproximadamente en los 20 años de edad de la persona.
Entre los medios que contribuyen al tratamiento de los enfermos están la actividad física y cognitiva, la alimentación (de tipo mediterránea), la interacción social y la realización de nuevas actividades que impliquen cierto esfuerzo de otros aprendizajes.
Para el tratamiento de esta especialidad y su eficaz diagnóstico y tratamiento, agregó, es necesaria la participación de varios especialistas empezando por los neurólogos y diversos tipos de
Por su parte Calleros Zubiate apuntó que enfermedades, como la diabetes, la hipertensión y la obesidad, alteran la vida de los pacientes y pueden predisponer a su deterioro neuronal conduciendo hacia el Alzheimer.
Además, dijo, al ser una enfermedad de deterioro progresivo de quienes la padecen ya hay medicamentos eficaces para solventar cuadros de depresión, entre otros, pero ello dependerá del diagnóstico de los especialistas.
Entre los cuadros a presentarse entre los enfermos el psiquiatra citó el deterioro verbal, conductas agresivas, ideas delirantes y alucinaciones.